Aclaraciones sobre la ‘Old Guard’, la Vieja Guardia del BDSM

 

Encuentro chocante la simplificación casi humorística de la historia bedesemera que suele leerse en internet, incluso en webs serias. Condensándolo un poco en broma, sería así:

• Antiguamente los esclavos recibían latigazos de lo lindo.
• Luego llegaron Sade y Sacher-Masoch. Escribieron unos tochos clásicos que nadie lee; pero pusieron nombre al sadismo y al masoquismo.
• Ya en el siglo XX llegó la Old Guard; esa ‘vieja guardia’ con todo el autoritarismo de sus normas férreas.
• Por suerte luego se creó el BDSM sano (incluso saludable); y ya por fin en siglo XXI hemos llegado a la escena los guays y ¡nos putoflipa!

La larga tradición de fetichismo y sadomaso que recorre todo el siglo XX a través de novela, foto, cómic y cine, y que —me parece— ha configurado más que la Old Guard la imaginería erótica y las prácticas del BDSM que conocemos, me gustaría repasarla en otra ocasión. Hoy quisiera comentar en particular el término Old Guard o Vieja Guardia, en cuyo uso bastante frecuente entre nosotros creo que hay un cierto malentendido.

Mencionemos algunos datos sobre la verdadera Old Guard:

• La Old Guard es una subcultura sadomaso y fetichista estrictamente reducida al mundo gay.
• Se inició tras la Segunda Guerra Mundial, alcanzando su esplendor durante los años 70 del s. XX, para perder casi toda su presencia (por efecto del SIDA, y por la aparición de la New Guard) durante la década de 1980.
• En el movimiento hay gran influencia militar; la escena se organiza en familias (leather family, aún puede verse en Fetlife), bandas de moteros estrictamente jerarquizadas, con todo tipo de reglas y rituales específicos de cada banda / familia (sin relación con los protocolos bedesemeros actuales, ver aquí una lista…), rangos militares y nobiliarios; ‘pruebas’ para ir subiendo en la jerarquía… etc. (Me trae e la memoria una cosa tipo Mad Max…)
• Se regían por la llamada norma de las tres ces: Comprometido, Compasivo y Consensuado  (The Three C’s: Committed, Compassionate, and Consensual). Si bien por su funcionamiento militar / feudal eran muy jerárquicos, estrictos con las normas de su banda, autoritarios, excluyentes hacia las mujeres, los heterosexuales, los switch…

 

 

Para visualizar lo que realmente fue la Old Guard, nada mejor que unas imágenes (en su vertiente más urbana, la escena puede apreciarse también en la película ‘Cruising (A la caza)‘ de William Friedkin (1980), con Al Pacino):

Realizando proezas en la moto para aumentar el prestigio en la banda. Imágenes del Satyrs Motorcycle Club

Imágenes del Satyrs Motorcycle Club

Imágenes del Satyrs Motorcycle Club

Imágenes del Satyrs Motorcycle Club

Pero, como decíamos, a mediados de los 80 este estilo perdió su existencia pujante y auténtica (si bien permaneció como estética, sobre todo en el ámbito gay) y se vió sustituida en el predominio de la escena por la New Guard.

Características de la New Guard / BDSM

• Incluye también a personas heterosexuales, lesbianas; así como switch. Igualmente pasa a ser aceptable la práctica lúdica (como juego) de las prácticas bedesemeras…
• En general, gana importancia el papel de la mujer, tanto en el terreno de la dominación (FemDom) como, dentro de la sumisión, en cuanto a la capacidad de negociaciones, límites…
• Cobra protagonismo lo interior, lo psicológico, la D/s, la dominación mental sin prácticas sadomasoquistas necesariamente…
• Aunque el cuero sigue siendo apreciado… la estética se aproxima más a un fetichismo decimonónico, o de la primera mitad del siglo XX: corsés, lencería, medias, tacones altos; y traje o al menos ropa formal negra para ellos.

Esta Nueva Guardia se acoge al SSC (definición creada por David Stein en 1983 para deslindar el sadomasoquismo consensuado de los malos tratos), se enriquece con elementos como la palabra de seguridad (1992)… y queda bautizada como BDSM en 1991.

Por supuesto el BDSM o Nueva Guardia tiene también algunas costumbres o tradiciones; pero son más bien ceremonias muy inspiradas en Historia de O, o en las kajiras goreanas o, posteriormente, en las capas rojas y máscaras de ‘Eyes wide shut‘. Son actos de implantación bastante reducida (al menos en España) y de carácter enteramente voluntario y principalmente romántico: imposiciones de collar, ceremonia de las rosas… Nada que ver con los rituales obligados, militares, jerárquicos, de los clanes de moteros Old Guard…

Posturas Goreanas – Nadu

En resumen, podemos decir que todo lo que conocemos y hemos conocido como escena BDSM, kinky, fetichista… cae dentro de la Nueva Guardia y del BDSM (incluso en los Clubs Leather de Chueca, intuyo que de los leathermen queda sobre todo la moda de vestuario). Y hoy carece de sentido real que alguien se reclame de, o sea incluido en, la Old Guard; por muy casposo y antiguo que suene su discurso. Simplemente ese calificativo hace referencia a otro estilo y momento histórico.

La Vieja Escuela

Sin embargo, es un hecho que el tiempo no deja de transcurrir; y aquella Nueva Guardia nacida durante los últimos años 80 y en los 90 del siglo pasado… ¡Tiene ya unos 30 años de antigüedad! Así pues, muchos de los participantes de la primera época de la Nueva Guardia, son ahora maduros… o muy maduros. Y es más bien una cuestión de edad, situarse ya en una posición de «hay que hacer las cosas como es debido», «es así porque siempre se ha hecho así», o incluso: «mientras vivas bajo mi techo tendrás que seguir mis normas»…

A este estilo del BDSM / Nueva Guardia, creado en los años 90 del siglo pasado, al conjunto de costumbres, símbolos, ceremonias, protocolos, significados de las palabras…, que desde entonces se han ido consolidando, se llama Vieja Escuela (o sea que la Nueva Guardia es ahora la Vieja Escuela, y de ahí la confusión).

Ser de la Vieja Escuela sí es algo que puede predicarse de los bedesemeros maduros que practican y defienden las costumbres y conceptos del BDSM que conocen desde su juventud (a veces conocidos jocosamente como ‘sadosaurios’…). E insisto, no hay nada en la filosofía de la New Guard / BDSM en sí misma que la haga pretender ser la única verdad, actuar de forma dogmática o autoritaria…; este dogmatismo, caso de darse, es sobre todo a título individual.

No entro aquí a evaluar la parte de razón que pueda haber en esas polémicas sobre la desvirtuación de los conceptos por parte de los jóvenes, etc., sino simplemente quiero resaltar que la clave está en la edad de los participantes, y en que se trata principalmente de un conflicto generacional, conflicto que se ha dado en todas las épocas y en todos los ámbitos de la vida.

Aquí unas ideas visuales de lo que puede entenderse por Vieja Escuela:

Actitudes de Amo y Sumisa

Ceremonia de las rosas

Evento protocolario en La Pastelería (Madrid)

Vestuario fetichista – Imagen de Helmut Newton

Teller de protocolo en México DF – Imagen de evento protocolario

Spank como correctivo

La Nueva Escuela

Con la llegada del siglo XXI, y más aún en su segunda década, se ha popularizado mucho lo bedesemero, especialmente su rama romántica, en la sociedad. A partir de esa popularización, muchas personas se han acercado y se siguen acercando con curiosidad al ámbito BDSM. Para ellos, los modos y maneras, costumbres, ceremonias, protocolos, ideas… de los más veteranos no significan nada en sí mismos. Y se lanzan alegremente a las prácticas, con escaso conocimiento y con escaso respeto por la ‘cultura’ del BDSM.

El conflicto entre esta Nueva Escuela con la anterior, la Vieja Escuela (no la Vieja Guardia, como este texto quisiera dejar claro) está servido, sobre todo cuando los veteranos se ponen en plan: «no tienen ni idea», «esto no es verdadero BDSM» y demás. O cuando los ‘nuevos’, que sí traen muy claras las ideologías vigentes en el momento actual, plantean con aspereza sus ideas (o exigencias) sobre lo que es aceptable o políticamente correcto.

¿Creará también la Nueva Escuela tradiciones, conceptos… que sean luego de uso general; y que eventualmente lleguen, en una generación posterior, a ser denostados por rancios? Es lo más probable, aunque todo eso está aún por ver…

 

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